Iglesias y Montero han pagado ya el 25% de la hipoteca del casoplón gracias a sus sueldos de ‘la casta’

La ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, y el ex vicepresidente segundo del Gobierno y titular de la cartera de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, ya han amortizado casi un 25% de la hipoteca del casoplón -desvelado en exclusiva por OKDIARIO- que se compraron en Galapagar (Madrid) en mayo de 2018. Así lo revela la última declaración de bienes y rentas presentada por Montero en el Congreso al perder su condición de diputada de Podemos tras las elecciones generales del pasado 23 de julio.

La declaración, publicada este viernes en el Boletín Oficial de las Cortes Generales y presentada el 30 de agosto en el registro de la Cámara Baja, refleja que Montero tiene un préstamo hipotecario de 540.000 euros (en concreto, el 50% de los importes totales) concedido el 9 de mayo de 2018 y del que todavía reconoce un saldo pendiente de 406.380,55 euros. Esta cantidad, según las normas del formulario, hace referencia a la cifra existente «a la fecha de 31 de diciembre del ejercicio anterior o cualquier día del mes inmediatamente anterior a la fecha de la presente declaración».

De esta manera, Pablo Iglesias, que causó baja como diputado de Podemos el 26 de marzo de 2021, e Irene Montero, que hizo lo propio el pasado 18 de agosto (continúa como ministra de Igualdad en funciones), han amortizado en este tiempo 133.619,45 euros del préstamo de su casoplón, o lo que es lo mismo, un 24,7% de la cantidad total de la hipoteca suscrita con la Caja de Ingenieros, que fue cuestionada en su día al tener unas condiciones ventajosas.

Propiedades de Irene Montero

Además, Irene Montero declara haber percibido 77.478,24 euros de sueldo como ministra en el último año, otra vivienda en Madrid y cuatro propiedades en Ávila -todas ellas de herencia-, un saldo de 65.238,13 euros en una cuenta corriente y otros 4.753,93 en una compartida al 50% y «vehículos» con fecha de adquisición del 23 de junio de 2018.

Se da la circunstancia de que a raíz de la exclusiva de OKDIARIO y ante la presión social por esta compra contraria a su discurso anticasta, Iglesias y Montero salieron a dar cuenta de los datos generales de la hipoteca. El entonces secretario general de Podemos y la que era su portavoz parlamentaria indicaron que su hipoteca de 540.000 euros tenía un tipo de interés fijo del 1,5% el primer año, mientras que en los siguientes años el tipo sería del 1,25% más el euríbor.

Junto a ello, señalaron que la cuota de la hipoteca sería de 1.863,65 euros mensuales el primer año; y el segundo año, siempre que el euríbor se mantuviese al mismo nivel, se situaría en 1.755,15. En total, esgrimieron que cada uno pagaría unos 877,5 euros cada mes.

Ya el primer año, de los 30 por los que firmaron la hipoteca, Iglesias y Montero amortizaron 64.412 euros del préstamo. Así se supo en junio de 2019 al tener que presentar en el Congreso sus declaraciones de bienes y rentas como diputados de la XIII Legislatura tras las elecciones generales del 28 de abril. En la última declaración de la ministra de Igualdad en funciones, al perder su condición de diputada, la amortización se eleva a 133.619,45 euros. Y todo, gracias a los sueldos de la casta que estos dirigentes de Podemos tanto demonizaban, pero que han ido percibiendo sin rechistar a lo largo de estos cinco años, pudiéndose costear el casoplón de 660.000 euros.

2.348 m2 de parcela

Este chalé situado en una zona acomodada de la sierra madrileña tiene 302 metros cuadrados construidos, incluyendo una majestuosa piscina, y se asienta sobre una parcela de 2.348 metros cuadrados de superficie, tal y como figura en la Dirección General del Catastro.

El interior consta de tres habitaciones, dos baños completos, hall, despensa y un extenso salón unido a la cocina a través de una barra americana. Además, fue adquirido con un baño en forma de tinaja en el exterior, dos plazas de aparcamiento; un amplio porche; la espectacular piscina construida con piedra de musgo en la parte superior; una casita para invitados levantada de manera independiente; un frondoso jardín adaptado a la vegetación del lugar (encinas, enebros, fresnos, jaras y pinos) y un pequeño huerto perfectamente cercado.